21. jul., 2019
En caravana los recuerdos pasan
con una estela dulce de emoción.
Quiero que sepas que al recordarte,
se van las penas del corazón.
(Mi Buenos Aires querido)
Regresé a esa ciudad en la que nunca había estado:
las calles, los bares, los hoteles,
la gente a la deriva.
Regresé a los bosques,
que solo habían existido en los poemas.
Allí vadeé un río,
vi el olmo viejo y erguido de Machado,
comí la fruta de la vida,
leí a Fray Luis de León bajo la sombra de un árbol.
Regresé a la casa en la que nunca había vivido:
los fantasmas, las leyendas, los conjuros.
Dormí en la habitación prohibida,
hurgué en los armarios y baúles.
Encontré un tesoro en el desván.
Regresé a la isla desierta de aquel cuento
y conocí a Robinson Crusoe.
Llené la maleta de guijarros,
escuché los sonidos de la selva.
Bebí del elixir de la eterna juventud.
Regresé un día como hoy hace mil años
a un mundo que nunca morirá.
Comentarios recientes
16.02 | 20:30
"El alma es un laberinto de estrellas,
una encrucijada de caminos sin fronteras,"
Me gusta este verso.
Describe muy bien mi visión del alma.
06.01 | 23:14
Me gustan tus poesias, expresan mucho y tienen tanta certeza. Soy una adolescente que escribe poesias tambien jaja, y tu blog me inspira a animarme a crearme el mio. Gracias!! Y segui publicando🙌
08.01 | 16:39
Me detengo un poco pensando que ahí donde nacen los bosques.. ya no hay nada... o más allá de la muerte.
13.12 | 07:34
Gracias. Me sirve de mucho tu comentario