5. mar., 2015
Todo muere antes que la rosa:
El escorpión, el alud, la mentira,
Incluso la tormenta y el presidio,
Incluso las promesas y sus miedos.
Todo muere antes que la rosa,
Incluso el relámpago y su herida
Incluso el desamparo y el olvido.
Porque la rosa es álgida y profunda
Como el aliento y el beso,
Como el asombro y el mármol.
Porque la rosa no sabe de destierros
E ignora al viento y a la bruma.
Porque la rosa no huye de las olas
Ni pronuncia oráculos cuando llora.
Porque la rosa es destino y presagio,
Amor que no sabe de la lluvia,
Amor que no compra madrugadas,
Que abruma y acaricia sin prospecto,
Que es anverso y reverso de un espejo
de un grito, de un tormento.
Por eso, ni la luna con su duelo,
Ni la noche con sus ojos,
Ni los muertos se atreven a olvidarla.
Comentarios recientes
16.02 | 20:30
"El alma es un laberinto de estrellas,
una encrucijada de caminos sin fronteras,"
Me gusta este verso.
Describe muy bien mi visión del alma.
06.01 | 23:14
Me gustan tus poesias, expresan mucho y tienen tanta certeza. Soy una adolescente que escribe poesias tambien jaja, y tu blog me inspira a animarme a crearme el mio. Gracias!! Y segui publicando🙌
08.01 | 16:39
Me detengo un poco pensando que ahí donde nacen los bosques.. ya no hay nada... o más allá de la muerte.
13.12 | 07:34
Gracias. Me sirve de mucho tu comentario